Hace algunas horas dábamos cuenta de una situación planteada de conflicto entre los trabajadores de la Fundación Coprosamen y la conducción de esa fundación. Recordemos que tiene la responsabilidad del control de ingreso de carnes y de lácteos, se financia con un porcentaje de esos ingresos y existen controles en los ingresos a la provincia de Mendoza. El más conocido es el ubicado sobre la ruta 7, en Desaguadero aunque también existe en la 188, en Canalejas, General Alvear.

Desde hace algunas horas se desató un importante conflicto, a tal punto de que hoy la fundación tiene las puertas cerradas en su sede central ubicada en la Sexta Sección, los trabajadores todavía no han cobrado el sueldo, aunque hay un sector que ha percibido parte de esos haberes y lo que se está dilucidando en estos momentos es el despido de otro grupo de trabajadores, sin causa. A esta hora se está realizando en la Subsecretaría de Trabajo una audiencia de conciliación, pero ayer se profundizaron estas diferencias.

Hubo un ataque denunciado por los trabajadores, un veterinario de la barrera de La Paz, se llama Néstor Giménez, dice que fue agredido por el marido de la presidente de la Fundación Coprosamen. Ese hecho ocurrió ayer alrededor de las 14:30, en la ruta 7, en el ingreso a La Paz

El veterinario relató: “A las 14:30 íbamos hacia nuestro departamento, a la altura de la curva, entrando a La Paz estaban arreglando la media calzada la empresa Cartellone, y estaban los conos. Cuando miro por el espejo, veo a una camioneta Toyota blanca a gran velocidad que intenta pasarme. Me pregunto: - Si me pasa están los conos, es decir, que va a agarrarlos, freno y se me metió de una. Iba con unos perros atrás. A todo esto me desestabilizó e incluso la camioneta también se desestabilizó un poco.

“Es más, pensábamos que uno de los dos se daba vuelta. Ahí lo reconocí, se bajó Claudio Aguilera, el marido de la presidente de la fundación Coprosamen, puse el seguro del auto y me empieza a agredir bajate, cagón, arreglemos las cosas acá y yo le explico que no tengo nada que arreglar.

“Si querés que arreglemos, vamos, seguimos y vamos a la comisaría; estábamos a un kilómetro de allí. Me dice vení, bajate, bajate, ahí le mete una piña al vidrio mío; los voy a cagar matando. Y agregó: vení, bajate, dejen de joder, muchas cosas, fue un momento difícil… Le digo; seguime y vamos a la comisaría, cuando pongo primera y voy saliendo siento un piñón en el vidrio trasero, de ahí me fui a la comisaría e hice la denuncia judicial que corresponde”.

Por estas horas la Dirección de Personas Jurídicas que depende del ministro Félix González, y el propio ministro, están analizando la intervención de la Fundación Coprosamen. Es uno de los pedidos de los trabajadores: que se intervenga para que se de claridad, entre otras cosas al manejo de fondos que tiene esta fundación.

Fuente: Radio Nihuil – Marcelo Luna

Diario UNO